Variedades: Garnacha Peluda.
Elaboración: Cultivada de forma integrada con el medio sobre suelos arcillo-calcáreos, de arena granítica y pizarra, la uva de La Peluda crece bajo la influencia de un clima mediterráneo seco. A la suavidad de las temperaturas característica de la zona se le suman una baja humedad y una cantidad escasa de lluvia durante todo el año. Las cepas, de entre 80 y 90 años, se sitúan a una altitud de 370 metros. La vinificación comienza con fases de maceración y fermentación —la cual se prolonga durante dos o tres semanas— y finaliza con la crianza del vino. La Peluda reposa, en última instancia, unos diez meses sobre sus lías en depósitos de acero inoxidable.
Nota de cata: En boca, muestra un gran carácter y volúmen. El final de boca acelerado por la vivacidad lo hace ligero en post gusto.